¿Los cables de fibra óptica se desgastan?
La fibra óptica en sí misma es un material duradero y resistente, pero factores externos y el manejo inadecuado pueden afectar su rendimiento y causar desgaste.
Te mostramos algunos de los principales factores que ocasionan el desgaste de la fibra óptica:
- Tensión y flexión excesivas: Si los cables se someten a una tensión excesiva o se doblan más allá del radio de curvatura recomendado, pueden dañarse. Esto puede ocurrir durante la instalación, mantenimiento o manipulación incorrecta de los cables.
- Ambiente externo: El entorno en el que se instalan los cables también puede influir en su desgaste. La exposición a temperaturas extremas, humedad, productos químicos corrosivos, vibraciones o impactos físicos puede afectar la integridad de los cables con el tiempo.
- Degradación por envejecimiento: A pesar de ser un material resistente, puede haber una degradación gradual a lo largo del tiempo debido a fenómenos como la atenuación óptica y la dispersión. Sin embargo, estos efectos suelen ser mínimos y es poco probable que afecten significativamente el rendimiento de los cables durante un período de tiempo razonable o a corto plazo.